UNA TURBAMULTA DE CENTENARES DE NIGERIANOS IMPIDEN EL ACCESO AL CASAL DE BARRIO

La turbamulta nigeriana agolpada a la entrada del Casal, 3 dic.10

El viernes 3 de diciembre de 2010, a las 9 de la mañana, me encaminé al Casal para preparar la Asesoría Gratuita para las comunidades de propietarios, que empieza media hora más tarde. Al llegar a la plaza del Centro de Salud vi a varios grupos de nigerianos, al doblar hacia la calle de José de Diego, contemplé una gran multitud de esta etnia bajo el techado del Centro de Salud, que iba aumentando y compactándose en la medida que me aproximaba a la entrada del Casal, que ofrecía un espectáculo dantesco, increíble: más de un centenar de personas, prensadas las unas a las otras, sin dejar ningún resquicio, formaban una masa impenetrable, inamovible, que impedía cualquier posibilidad de acceso al Casal y a la Oficina de la Policía Local. ¡Impresionante!.

Me armé de valor, subí, como pude, la escalinata  y a duras penas llegué al borde del rellano de acceso a la entrada y se acabó, nadie se movía ni un milímetro, nada, ya podías empujar, era imposible, ni te miraban, totalmente pegados y a conservar el sitio. Era un espectáculo alucinante. Empecé a gritar, que me dejaran pasar, nada. De pronto me fijé que en el interior había varios nigerianos, bien vestidos, con uno en el centro, que parecía el jefe, con un sombrero a especie de cacerola antigua, metido hasta la sien, y empecé a manotear llamándoles la atención para que abrieran -aquello estaba cerrado a cal y canto- y esos personajes temían que si abrían, serían arrollados por la turbamulta. Empezaron a fijarse en mí y a consultarse; en aquel momento un joven nigeriano, pegado a mí, salió en mi ayuda y en inglés les dijo que abrieran que yo iba a prestar un servicio a los vecinos.

Entonces reaccionaron, mirándose los unos a los otros, y colocándose detrás de la puerta, que entreabrieron levemente, Empecé a empujar y el joven mucho más que yo, gritándo que cedieran el paso y al rato logré entrar a toda presión, momento en que cerraron de nuevo. Y subí al aula 3, haciendo todos los preparativos para cuando llegara el asesor a las 9:30 horas.

Ahí permanecen los nigerianos bajo la lluvia, 3 diciembre 2010

Poco después, llegó un furgón de la Policía Nacional, del cual descendieron 4 o 5 policías, que empezaron a tomar posiciones para controlar aquel desastre y facilitando que varias personas pudieran entrar a realizar su labor. Más adelante, hubo altercados entre los nigerianos, debiendo acudir una segunda dotación de la Policía Nacional. La Policía Local, que tiene su sede allí mismo, no compareció hasta que transcurrió un buen tiempo. Hay que ver, para creer.

La Policía Nacional, siempre cumpliendo, 3 diciembre 2010

Mientras tanto, los de la legación nigeriana entraban en todas las aulas y las preparaban para recibir en ellas a los que esperaban abajo para que les arreglaran los papeles, es decir, les legalizaran su situación de inmigrantes en España. Por dos veces entraron en el aula 3 y les dije que estaba ocupada y que no insistieran. No volvieron. Y poco a poco empezaron a subir los que esperaban y les fueron asistiendo en las distintas aulas.

Acaba de llegar el segundo furgón de la Policía Nacional, 3/12/10

Muchos de ustedes, que no tienen conocimiento de lo que sucede en Son Gotleu, se preguntarán ¿cómo es posible que en pleno siglo XXI se den estos espectáculos dantescos -semejantes a los de tribus salvajes en el África profunda- con el beneplácido del Ayuntamiento de Palma y la Delegación del Gobierno, sin que nadie se preocupe por ello?.

Aguantando bajo la lluvia, los otros bajo el techo del Centro de Salud, 3/12/10

Es muy sencillo, nuestras "autoridades" se han entregado en cuerpo y alma a esta imparable invasión inmigratoria, otorgándole todos los beneficios habidos y por haber, aún a sabiendas de que están discriminando con ello al resto de la población, cuya indignación sube de día en día, al verse menospreciada por unos gobernantes que han votado y que incumplen el principio de igualdad que nos hemos dado con la Constitución del 78, todavía vigente.

En Son Gotleu, esta desigualdad se manifiesta de un modo muy superior al resto de la ciudad y de la Isla. El Ayuntamiento de Palma hace dos años decidió dedicar los fondos europeos para el conjunto de la inmigración de la ciudad, exclusivamente en el barrio de Son Gotleu, para causar un mayor impacto político. Advertimos a la Alcaldesa y al Delegado del Gobierno que no cometieran semejante barbaridad, puesto que significaría una discriminación intolerable para el resto de la población que se hallaría sometida a un auténtico ghetto, como así ha sido.

Además, estos malos gobernantes que no creen en la democracia, han dado poder dentro de Son Gotleu a "Nigeria Unida", la más importante y violenta organización africana, manteniendo contínuas reuniones con sus dirigentes en el Casal de Barrio, otorgándoles todo tipo de beneficios. Y han conseguido que esta organización se crezca e imponga su ley, la única que conocen, la de la fuerza.

A esta dinámica, se han unido otras organizaciones africanas, como la senegalesa "YAPO", que está asesorada por el presidente de Veïns Sense Fronteres, Jaume Obrador, que al mismo tiempo es el Coordinador del Observatorio de Igualdad del Ayuntamiento de Palma -de igualdad para los negros será- y cuya Vicepresidenta de Veîns Sense Fronteres, Maribel Alcázar, desarrolla en Participación Ciudadana, como técnica, una gran actividad en favor de los negros africanos, lo mismo sucede con la secretaria de VSF, que ocupa un cargo técnico importante en Participación Ciudadana. Es decir, que los tres cargos más importantes de VSF, dominan la situación técnica en Participación Ciudadana, a las órdenes del concejal Eberhard Grosske, que les tiene en alta consideración, pues sirven a la perfección a sus fines de dar todo el poder a los negros africanos.

Manolo Cámara: "Gracias morenitos. Gracias a vosotros Son Gotleu mejora", 18/11/10

Eberhard Grosske, con el beneplácido de Aina Calvo, recientemente ha hecho una concesión fraudulenta y de total ilegalidad a tres asociaciones africanas: Nigeria Unida, YAPO, y otra también senegalesa, otorgándoles la concesión de los espacios libres de los Bloques Blancos de Son Gotleu, que el Ayuntamiento se ha apropiado ilegalmente incumpliendo lo establecido en el artº 17 y otros de la Ley de Propiedad Horizontal. Y además, tienen la desvergüenza de anunciar a bombo y platillo el 18 de noviembre, en una masiva reunión con las asociaciones de negros africanos, concesionarias de este delito, lo siguiente, por boca del consejero Manolo Cámara: "Damos las gracias a los morenitos africanos, por la importante iniciativa que han tenido de mejorar y embellecer este barrio. Gracias a vosotros Son Gotleu esta cambiando a mejor". A continuación, en parecidos términos, habló José Miró, el mamporrero de turno que mandó Grosske. Seguido del presidente de una de las asociaciones africanas beneficiadas, felicitándose de que su iniciativa de ajardinar la zona fuera aceptada por el Ayuntamiento. Y finalmente, el jardinero -compañero del partido de Grosske- que dirige las operaciones.

El jardinero del partido de Grosske, 18 noviembre 2010

Quizás con lo expuesto hasta aquí se entienda por qué se permite a la más importante organización africana que haga las cosas de cualquier modo, reiteradamente, porque no es la primera vez que esto ocurre.

Según ULTIMA HORA del lunes 6 de diciembre, la presencia de la legación nigeriana, con su labor de legalizar a sus ciudadanos, se prolongó al sábado y al domingo, terminando a palo limpio, a causa de que hubo nigerianos que se sintieron defraudados al cobrarles 200 €, en lugar de los 150 € previstos, persiguiendo al responsable de la legación, posiblemente el cónsul, que pudo huir protegido por la Policía Nacional. ¡Qué vergüenza, señores de la casta política que nos gobierna! ¡Qué papelón obligan a cumplir a los buenos servidores de la Ley!. Hagan que los nigerianos pasen por Extranjería.

El martes, 7 de diciembre, cuando el personal entró en el Casal, quedó espantado al ver el tremento espectáculo  que se ofrecía a sus ojos: los suelos pringosos, grasientos, con mucha suciedad, incluyendo restos de comida; todas las salas sucias, con alteraciones en su mobiliario; al entrar en los baños, les entró un asco tremendo, llenos de inmundicas por todas partes y sus azulejos asquerosos a más no poder. Los nigerianos se habían comportado como auténticos salvajes, sin respetar nada.

Y ustedes pueden pensar, tampoco es para tanto, por una vez que sucede por la gran masificación.

No señores, están equivocados, esto sucede cada día, pues los nigerianos son los que más utilizan el Casal, por la preferencia enfermiza que tienen de ellos los políticos de turno: unos auténticos sinvergüenzas que se lo permiten todo y cada vez les dan más poder. Siempre ensucian las dependencias que ocupan y son unos guarros que hasta se mean en las papeleras, rompen las manecillas de las ventanas, que han tenido que ser sustituidas todas, rompen el ascensor, ya lleva un mes y medio roto. Y el Ayuntamiento está mirando hacia otro lado. Mientras que las personas que cada día pagan por las actividades de ocio que realizan en el Casal, están soportando lo indecible, con indignación creciente. Se van a plantar ante el Ayuntamiento.